lunes, octubre 18, 2010

El vuelo




Emprendo un vuelo en silencio
A ras y con los ojos cerrados
Tomándote de las manos
Como si el tiempo no nos tocase
Alzamos un vuelo.

Emprendo un delirio silencioso
El delirio de vivir
Bajo los ojos de cada noche
Como si la luna nos acompañase
Volamos en delirio.

Tomo el secreto de la voz
Como si fuese una lucecita en la oscuridad
Una palabra, un soneto
Tan volátil, pero tan cierto
Un pequeño poema, un gran vuelo.

Alzo los brazos, sin esperar que alguien
                                               [me tome]
Sino para abrazar algo más que el cielo
Quizás la continuidad de mi vuelo
Sabiendo que lo perpetuo está en los instantes
Sabiendo que el instante es un parpadeo
                                                      [irrepetible].

Vuelo, sin ese desgano de la quietud
Y dejo una sonrisa en el aire
Para que lo imposible muera
Así que toma mi mano y volemos
Para que los sueños se jacten de mezclarse
                                       [con nuestro mundo].

Alzo un vuelo, cercano a toda lejanía
Como lo sería caminar con los pies sobre la
                                                                  [tierra]
Y hundirse en la indiferencia del respiro agónico
Y las raíces de la inmovilidad carcelaria
Ven, alcemos un vuelo.